Archivado en 25 julio 2018

Recetas para los días de fríooooo

25 julio, 2018

Tarta de champiñones y verdeo ( 4 porciones )

Ingredientes : 1 disco de masa de tarta,3 cucharadas de aceite,4 puerros,250 g de champiñones,3 huevos, 1/2 pote de queso diet , 3 cucharadas de queso port salut rallado, sal y pimienta

1-Tapizar un molde de 22 cm. de diámetro con la masa de tarta. Precocinar la masa en un horno medio hasta apenas dorar.
2-Cocinar en el aceite los puerros picados durante 3 minutos, incorporar los champiñones cortados en fetas y cocinar hasta que el agua de estos se absorba. Agregar los saborizantes a gusto
3-Mezclar los huevos con el queso diet y el queso port salut , incorporar a la preparación de los champiñones. Salpimentar.
4-Colocar sobre la masa y hornear a temperatura media a alta durante aproximadamente 30 minutos.
5-Acompañar con hojas verdes.

Pollo con condimentos y crema ( 4 porciones )

Ingredientes: 1 kg de pollo cortado en cubos chico, 2 cucharadas de postre de aceite, 2 ajos, 2 cebollas, comino, cúrcuma, sal y pimienta, 1 lata de tomates enteros, media lata de crema baja en grasas

1-En una cacerola calentamos el aceite, picamos la cebolla y el ajo, agregamos la cúrcuma, el comino, sal y pimienta a gusto
2-Cocinamos todo a fuego mediano evitando que las especies se quemen, y vamos incorporando a la mezcla el pollo.
3-Revolvemos hasta que los cubos tomen el color de las especies.
4-Agregamos los tomates triturados que aplastaremos de apoco con un tenedor, lo tapamos y lo dejamos cocinarse por una hora y 15 minutos a fuego bajo.
5-Cuando la preparación ya está, le agregamos el pote de crema baja en grasas y la dejamos por 5 minutos más.
6-Destapamos y ya queda lista para servir junto con algún arroz que ya tengamos cocinado de antemano.
7.Para servir, colocamos el arroz blanco en una fuente honda y por encima le tiramos los pedacitos de pollo y espolvoreamos con curry.

Los cítricos, las frutas del invierno

18 julio, 2018

Los cítricos son una fuente de flavonoides, vitamina C, folatos y potasio, nutrientes que en conjunto preservan la salud cardiovascular

Los cítricos como las naranjas,las mandarinas,pomelos y limones son las frutas de invierno por excelencia. Son una fuente destacable de flavonoides (naringenina, hesperidina o limoneno),vitamina C y folatos, nutrientes que en conjunto preservan la salud cardiovascular a través de distintos mecanismos biológicos de acción. Además, de manera indirecta, el consumo de un cítrico al día favorece la absorción de hierro. Con la ingesta de una naranja mediana o tres mandarinas al día se cubren los requerimientos diarios de vitamina C, que participa en la salud del colágeno y las articulaciones, en las reacciones de oxidación y en el sistema de defensas.

Los flavonoides de los cítricos participan en la inhibición de la oxidación de la fracción LDL-colesterol, cuyo exceso endurece las paredes arteriales y compromete la salud cardiovascular. Un vaso de jugo fresco de naranja (200 ml) aporta unos 80 mg de vitamina C diarios.

Los cítricos a su vez, contribuyen a la dieta con su aporte de ácido fólico,el cuál forma parte del ciclo metabólico que permite la reducción de los niveles de homocisteína, un componente del cual se sabe con certeza que, en exceso y de manera independiente a los niveles plasmáticos de colesterol, es un factor de riesgo cardiovascular.

Beneficios del consumo de cítricos
• Ayudan a combatir los procesos degenerativos, gracias a su alto contenido de ácido ascórbico (Vitamina C).
• Previenen muchas enfermedades de la piel.
• Aportan fibra, excelente para la actividad intestinal.
• Favorecen la digestión.
• Constituyen los mejores antioxidantes, ayudando a prevenir múltiples enfermedades, entre ellas las cardiovasculares, las degenerativas e incluso el cáncer.
• Ya que ayudan a la absorción del hierro, impiden la aparición de anemia.
• Mejoran la cicatrización de las heridas.
• Contribuyen a prevenir y reducir las enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio, como resfriados, gripes, bronquitis o faringitis.

Mitos y verdades de las dietas….parte II

11 julio, 2018

“¡Probé con todas: la dieta de las frutas, la de las proteínas,
la de los carbohidratos y ninguna funciona!”

Ningún plan que excluye a un determinado grupo alimentario para bajar de peso puede tener éxito. Un plan debe tener un poco de todo y también –para que no sea más fácil de llevar- algunos alimentos que ingerimos cuando no estamos a dieta. Pero lo más importante es asegurarse que no se interrumpa la variedad de nutrientes, vitaminas y minerales que el cuerpo necesita y de los que no se puede privar en ningún momento de la vida. Por ejemplo, una dieta exclusiva en frutas y verduras, si bien podría pensarse que es muy sana, debilita el organismo y provoca una salida directa al famoso ‘efecto rebote’, que siempre es agresivo. Es que, cuando el organismo sufre una baja calórica muy marcada y de repente vuelve a ingerir algo más contundente, se aferra a ese contenido por miedo a volver a la hambruna. Otro punto a tener en cuenta es que muchas frutas y verduras, sobre todo las de hojas verdes, hinchan el estómago y no brindan sensación de saciedad. Esto provoca que se vean más tentadas a salirse del plan propuesto.
Recomendación: la mejor manera de estar en peso, es siguiendo un plan saludables y supervisado

“Me la paso comiendo fibras y abandoné las carnes,
no sé por qué no bajo de peso”

Muchas personas asocian la carne con grasa y las fibras con dieta. Lo cierto es que suprimir las proteínas que aportan las carnes al organismo puede producir anemia, generalmente desatada por la carencia de hierro en la sangre, y esto tampoco asegura un descenso de peso. ¿Por qué? Las carnes magras otorgan saciedad, son nutritivas y pueden ser aliadas insustituibles en una dieta bien armada. Con respecto a las fibras, es cierto que su aporte es indispensable, ya que brindan saciedad y son saludables y ayudan a bajar de peso por su poco contenido en grasas, pero eso no quiere decir que no contengan calorías: salvado de avena, avena arrollada, legumbres, salvado de trigo, cereales, panes integrales, cáscaras y tallos de verduras y frutas, son ricos en fibras, pero no pueden comerse indiscriminadamente y de ninguna manera reemplazan el aporte que brinda un bife de lomo o una pechuga de pollo.
Recomendación: incluya variedad de alimentos en sus comidas diarias

“Cambio la cena por un té con masas, total las calorías
son las mismas que las de un bife con ensalada”

Si bien esta premisa puede ser cierta, es tramposa. En una dieta, no sólo cuenta las calorías, sino los nutrientes que ingerimos. Los glúcidos simples (azúcares y harinas blancas) y son adictivos, si hacemos reemplazos calóricos arbitrarios, iniciamos un círculo vicioso. En palabras más simples: lo dulce provoca ganas de comer más dulce, al tiempo que se adhiere al músculo, generando los indeseables flotadores o pantalones de montar, depósitos de grasa que es muy difícil de hacer desaparecer una vez instalados. Estos reemplazos pueden servir para una ocasión en particular pero no deben establecerse como patrones alimentarios. Por otra parte, las grasas saturadas (presentes en manteca, crema y quesos) son más difíciles de combustionar como energía, esto significa que hay que hacer más actividad física para quemarlos que si esas mismas calorías provienen de un bife con ensalada.
Recomendación: se puede compensar en el contexto de un plan alimentario armónico, saludable, variado, y completo

Mitos y verdades sobre las dietas ..parte I

4 julio, 2018

“Si me mato en el gym, bajo de peso en una semana”

La actividad física es importante pero no puede suplantar a la dieta y mucho menos realizarse de manera brusca e indiscriminada. Las consecuencias pueden ser graves, ya que, no solo no vamos a bajar lo que queremos, sino que podemos, lastimarnos en el intento. El pasaje del sedentarismo a la actividad debe ser paulatino y controlado, sobre todo cuando se trata de ejercicios aeróbicos que requieren una evaluación del estado de salud general. Si no venimos entrenando en el gimnasio, no es prudente acordarnos a último momento que necesitamos bajar rápidamente de peso, empezar a ir todos los días con desesperación sólo nos producirá más hambre y menos ganas de correr en la cinta.
Recomendación: comience con una actividad que le guste, previa consulta con su médico

“Llené la heladera de productos Light, 0% grasas y diet.
¡Ahora sí voy a adelgazar!

Mayonesa, panes, postres y hasta alfajores se promocionan bajo el rótulo de ‘light’ sin especificar demasiado qué diferencia calórica tienen con la versión tradicional. Tampoco suele aclararse que el hecho de ser Light no quiere decir que adelgace, sino tal vez que no engorda tanto. “Lo Light significa que es un alimento reducido en calorías, siempre en relación con el alimento tradicional. Es peligroso pensar que se pueden consumir indiscriminadamente. Es más, no sólo pueden impedir que bajemos de peso, si no que pueden hacernos aumentar”. Por otra parte, los productos que se promocionan como 0% también son traicioneros: este valor significa que el producto es 0% de grasas, pero no asegura que sea bajas calorías. Por ende, pueden tener azúcares agregados y sus calorías no ser tan reducidas como suponemos. También están los alimentos diet: “En general los dulces tienen este rótulo. Estos productos contienen fructuosa que, a diferencia de los que mucha gente piensa, tiene las mismas calorías por gramo.
Recomendación: Es imprescindible aprender a leer las etiquetas y consumir con moderación como conducta, no según la etiqueta del producto

“¡El sábado tengo una fiestas, necesito una dieta shock!”

Una actitud muy común es la desesperación que impone un gran evento: sabemos que tenemos una fiesta en breve y queremos lucirnos en ese vestido que tan nos quedaba la temporada pasada. La idea es no es nueva: hacer una dieta rigurosísima para bajar los kilos extra apenas 15 días. Error fatal. Las dietas tienden a plantearse con un poco de tiempo, porque los buenos resultados se notan con el correr de los meses, el descenso es más auténtico y prolongado, y la purificación del organismo es total.
Recomendación: trate de adoptar un estilo saludable, comiendo ordenado, cuidando la porción y con actividad física regular