Archivado en 30 agosto 2017

Cuando es necesario aumentar de peso sin “engordar”

30 agosto, 2017

Subir de peso no implica llenarnos de alimentos de alto valor calórico sino mejorar nuestra alimentación de manera saludable para lograr un peso saludable, aumentando la masa magra (músculo) y el agua corporal sin aumentar la grasa por encima de valores saludables.
El peso corporal solo es un dato pero no el más importante, conocer la composición corporal permite valorar si el aumento de peso es a expensas de agua, músculo o grasa.

Una alimentación equilibrada y la actividad física nos asegurarán un aumento de peso saludable.
¿Cómo elegimos un buen plan alimentario para aumentar de peso saludablemente?

-Incluir proteínas diariamente, son necesarias como materia prima para el aumento de la masa muscular, son la fuente de aminoácidos y especialmente de los aminoácidos escenciales necesarios para la regeneración de las células. Las proteínas pueden ser de origen animal o vegetal. Las de origen animal, carnes blancas y rojas, clara de huevo, lácteos: leche y quesos son consideradas completas y de mayor calidad biológica. Las de origen vegetal, legumbres y cereales, frutas secas bien combinadas también aseguran ser una buena fuente de aminoácidos. Combinar proteinas de ambas fuentes naturales asegura una alimentación equilibrada.

-Consumir hidratos de carbono, son la principal fuente de energía para el organismo humano. Si bien tienen mala prensa por la epidemia de obesidad y diabetes, saber seleccionar el tipo de hidrato de carbono (azúcares) permite tener una dieta saludable.
Necesitamos energía para que el cuerpo funcione y para permitir el crecimiento y reparación de los tejidos, así el aumento de peso será a partir de tejido muscular pero la energía para su síntesis vendrá de los hidratos de carbono.
En todas las comidas debemos contemplar incorporar hidratos de carbono complejos, ¿cuáles son? Cereales (trigo, maíz, cebada, centeno, avena) como cereales texturizados (copos), harinas (galletas, pan especialmente los integrales o semillados, productos de panificación), granos incluidos en las comidas principales: arroz, choclo, cuscús. Pastas, especialmente de harina integral o de trigo candeal, cocidos al dente sin agregados de grasas (evitar cremas o quesos duros) sino condimentados con salsas de vegetales o aceite de oliva y verduras. Las legumbres como lenteja, porotos y garbanzos son un aliado importante al incluir este grupo de alimentos.
Aseguran la ingesta de hidratos de carbono necesaria y pueden consumirse como plato principal o como ingrediente de la comida (en ensaladas, guisos)

-Las Semillas y frutas secas son muy recomendadas porque aportan valor calórico por su contenido en grasas saludables y proteínas de origen vegetal. Pueden usarse en las comidas principales o como colación (entre comidas).

Combinar estas indicaciones en un plato es lo que favorece el aumento de peso a expensas de masa muscular evitando con la dieta aumentar excesivamente la insulina en sangre después de las comidas. Cuando la insulina aumenta excesivamente por estimulación de una dieta muy rica en azúcares simples y grasas favorece una situación metabólica denominada Insulinorresistencia que privilegia el aumento de la masa grasa. Si consumimos una comida con una buena combinación de proteínas e hidratos de carbono complejos, la insulina se secreta en cantidades adecuadas favoreciendo el “anabolismo” o sea la síntesis de tejido magro (músculo) y otros tejidos del cuerpo.

Combinar esta alimentación con ejercicio físico es indispensable para que el aumento de peso sea saludable.

-Vitaminas y minerales una buena alimentación asegura la ingesta de los micronutrientes necesarios por lo cual no se requiere suplementar los mismos farmacologicamente.
Los micronutrientes, vitaminas y minerales, son esenciales para que nuestro cuerpo pueda
responder saludablemente a la actividad diaria, su crecimiento y desarrollo.

¿Cómo hago para tener más músculo?

La respuesta es: haga más actividad física
La combinación de dieta y ejercicio permitirá que logremos el objetivo de aumentar de peso saludablemente. Practicar ejercicio en forma regular y continuada permite entrenar al músculo y combinar ejercicios de aeróbicos (caminata, correr, nadar, bicicleta) con ejercicios anaeróbicos (musculación, ejercicios de repetición de series, pesas) asegura que el cuerpo tenga un estado anabólico de la masa muscular lo cual se evidencia con aumento del tamaño muscular por aumento de la actividad del músculo.

No se ha demostrado que las dietas con gran consumo de proteínas sean beneficiosas por ello la suplementación con proteínas como la creatina pueden ser riesgosas para la salud y sólo deben indicarse bajo supervisión médica en determinadas circunstancias.

DECÁLOGO DE LA HIDRATACIÓN SALUDABLE

23 agosto, 2017

La mejor forma de cubrir las necesidades de líquidos pasa por ingerir agua, pero también es posible conseguirlo a través del agua que contienen los alimentos, otras bebidas como caldos, infusiones suaves o jugos , y con la mayoría de frutas y verduras, en las que el agua puede representar entre el 90% y el 98% del peso total.

Durante el día, el agua que pueden aportar los alimentos oscila entre 700 y 1.000 ml/día, por lo que no resulta suficiente como para satisfacer las necesidades fisiológicas. Una vez en el tracto digestivo, los nutrientes que componen los alimentos (hidratos de carbono, proteínas y grasas) se aprovechan y en este proceso también se genera agua, unos 200-300 ml. Con ambas cifras, se consigue un aporte de unos 1.100 ml, por lo que se deben ingerir como mínimo otros 1.000 ml de líquido extra para compensar las pérdidas.

1. Ingerir líquidos en cada comida y entre las mismas.
2. Elegir el agua sobre el resto de bebidas
3. Aumentar el consumo de frutas, verduras y ensaladas.
4. No esperar a tener sensación de sed para beber. Disponer de agua u otro líquido a mano.
5. Mantener las bebidas a temperatura moderada, ya que si están muy frías o muy calientes, en general, se bebe menos.
6. Los niños y ancianos tienen un riesgo mayor de deshidratación.
7. Elegir las bebidas de acuerdo al nivel de actividad física, necesidades de salud y estilo de vida.
8. Aumentar la ingesta de líquidos en ambientes calurosos y antes, durante y después del ejercicio.
9. Consumir agua y bebidas bajas en calorías si se quiere controlar la ingesta calórica o el peso.
10. Diez raciones de líquidos al día es una buena referencia para una correcta hidratación. (1 ración = 200 a 250 ml)

Diabetes – Diabesidad: diabetes y obesidad

16 agosto, 2017

Tradicionalmente, la diabetes de tipo II solía aparecer en personas de mediana edad o mayores, pero en los últimos años ha aumentado de forma alarmante el número de casos en todas las edades, incluyendo niños y adolescentes. La clave está en un concepto que ha ido “ganando peso” en los últimos años como es la “diabesidad”, que es el resultado de la suma de dos términos estrechamente relacionados: diabetes y obesidad.

El término diabesidad es la relación entre la diabetes y la obesidad. Una enfermedad causa la otra, ya que la obesidad es causa segura de diabetes de tipo 2. Se ha de incidir en la salud desde la infancia, controlar el peso, evitar la obesidad, ya que esta prevención será el éxito del mañana.

El obeso se hace, si bien hay agregación familiar a través de la genética pero también a través del comportamiento, ya sea hábitos de vida, forma de comer, practicar ejercicio, etc.

El 85% de los sujetos con diabetes de tipo 2 son obesos, pero en el 15% restante puede no ser obesa, pero si tener un índice de grasa abdominal elevada.

El objetivo para aquellos pacientes con obesidad es reducir un mínimo del 5% o el 10% de su peso en tres o cuatro meses. Sin embargo, el perder peso no debe ser una carrera por lograr una cifra, sino que perdiendo esos porcentajes bajos, el paciente mejorará ciertos valores médicos, mejorando su autoestima, y animándolo a seguir con un tratamiento lento pero progresivo para ir reduciendo el peso.

La condición humana se ha ido modificando, ya que la vida de hoy en día difiere al máximo de la vida de nuestros antepasados en la prehistoria, ya que antes el hombre era cazador, acostumbrado a recorrer largas distancias a pié, comiendo sólo cuando podían, y actualmente, los hábitos son diametralmente opuestos; se come algo más, siempre sentados, se trabaja sentado, nos desplazamos en vehículos o en transportes pero no andando o corriendo, y por tanto, nuestros genes no se han adaptado todavía a estos cambios en nuestra sociedad.

El objetivo del tratamiento pasa por reducir la obesidad y conjuntamente corregir y controlar la diabetes, sin olvidar otros parámetros paralelos como van a ser el colesterol y la hipertensión. En la práctica clínica es difícil cambiar los patrones de vida de los pacientes, y ello hace que la labor divulgativa, recordatoria y de imposición de nuevos hábitos sea fundamental para mejorar la prevalencia actual de esta enfermedad.

La participación del paciente es fundamental, debe saber el origen de su enfermedad, debe estar atento con los alimentos que incorpora , modificar ciertas conductas alimentarias, practicar ejercicio físico, y a ser posible, mejorar todos esos patrones de forma conjunta ya que así se mejora la eficacia.

De qué forma se puede medir la composición corporal?

9 agosto, 2017

El estudio de la composición corporal puede hacerse por varios métodos indirectos que dividen al cuerpo humano en varios compartimientos, algunos son de gran complejidad y reservados para estudios de investigación. El modelo que se utiliza en la práctica clínica es aquel que divide en dos sectores: la masa grasa y la masa libre de grasa, esta incluye: la masa muscular, el hueso, las vísceras y otros tejidos no grasos. Dentro de las técnicas utilizadas para su estudio encontramos a la Bioimpedancia.

¿En qué consiste la bioimpedancia?
Es una técnica que permite determinar la composición corporal, a través de la medición de la resistencia de los distintos tejidos, al pasarles una corriente alterna imperceptible para el cuerpo, la cual depende del contenido de agua y electrolitos de los distintos tejidos. A través de la medida del agua corporal se determina el contenido de la masa magra y masa grasa.

¿Es doloroso el estudio?
No, la bioimpedancia permite valorar la composición corporal de forma fácil, rápida, segura y no invasiva. Se realiza colocando electrodos en la mano y en el pie derecho, con el paciente acostado en una camilla con ropa liviana y sin calzado.
Antes de realizar el estudio debe hacerse un ayuno de 4 horas; se debe evitar tomar infusiones como café, té o mate 12hs. antes; alcohol 24hs. antes, no se debe realizar actividad física intensa 12hs. antes, se deben quitar todo los objetos metálicos(relojes, cadenas, anillos) y las mujeres no pueden realizar el estudio durante el período menstrual, para evitar los cambios en el estado de hidratación.
El estudio se realiza en aproximadamente 20 minutos.

¿Me sirve realizar una bioimpedancia?
La bioimpedancia permite determinar la magnitud de cada componente (masa grasa y masa magra) del cuerpo, que no se pueden medir solo con el peso y la talla. Permite, de este modo, la indicación de un tratamiento más personalizado, y además evaluar los cambios en la composición corporal, que ocurren durante el transcurso del tratamiento.

¿Qué es la composición corporal?
El cuerpo humano está conformado por elementos de la tierra, moléculas químicas, que conforman tejidos y forman nuestro cuerpo. Los elementos básicos son el carbono, el hidrógeno, el oxígeno y el nitrógeno; los cuales en diversas combinaciones forman los nutrientes: hidratos de carbono (azúcares), proteínas y grasas, estos nutrientes son parte de los alimentos que, junto con el agua, al ser ingeridos por el hombre aportan la materia prima de la que estamos compuestos.
Como dijo Hipócrates (IV a.C): somos lo que comemos.
Para formar nuestro cuerpo obtenemos energía a partir de los alimentos: hidratos de carbono y grasas, y la fuente estructural o plástica: las proteínas, sumando las vitaminas y minerales que en pequeñas cantidades son indispensables para la vida.
La composición corporal tiene un impacto significativo en la salud, y tanto el desempeño físico del individuo, como el sedentarismo, afectan directamente la composición corporal. Por ello se desarrollaron técnicas para medir los componentes del cuerpo, los más importantes son la grasa corporal total, la masa magra o sin grasa, la masa ósea y el agua corporal total.
La mayor parte del peso corporal es agua, mientras que menores cantidades corresponden a la grasa corporal total, la proteína, los minerales y los hidratos de carbono. El aumento o descenso del peso puede corresponder a uno o más componentes.

¿Cuánto más agua corporal, menos grasa?
El agua corporal total promedio del adulto corresponde aproximadamente al 60% del peso corporal, el 40% restante corresponde al tejido seco.
De la masa libre de grasa corresponde un 70% de su peso al agua, mientras que en la masa grasa el agua solo corresponde a menos del 10%. Esto da cuenta de que la mayoría del agua corporal está contenida en la masa magra, con lo cual el porcentaje de agua corporal aumentará con la pérdida de grasa y el aumento de tejido magro.
La composición corporal está influida por muchos factores como la edad, el sexo, la dieta y el nivel de actividad física.
En los bebes el agua corporal total corresponde al 70% del peso corporal mientras que en los ancianos sólo al 50%. Esto se debe a que, en la edad adulta, el tejido muscular disminuye por la poca frecuencia en la actividad física.
También existen diferencias de género en la composición corporal, de esta manera las mujeres tienen más cantidad de tejido adiposo, cuya distribución principalmente se ubica en el hemicuerpo inferior. Esta distribución se relaciona con la postura, con las condiciones mecánicas del embarazo, las necesidades de reservas para el feto y el neonato. La distribución del tejido adiposo en la mujer durante la edad fértil, es una expresión secundaria de las hormonas sexuales.
Mientras que en el hombre el tejido adiposo predomina en el hemicuerpo superior, esto se relaciona con la hormona masculina, la testosterona.

¿Dónde se puede medir la composición corporal?
La Sección Nutrición del Hospital Italiano realiza, hace más de 12 años, la valoración del estado nutricional por bioimpedancia eléctrica y antropometría, a través de medición de pliegues corporales y electrodos, que se refleja su exactitud en los resultados

Niveles de azúcar en sangre…Hipoglucemia e Hiperglucemia

2 agosto, 2017

Cuando un paciente tiene diabetes, es importante que sus familiares cercanos y amigos lo sepan y sobre todo que hacer cuando bajan los niveles de azúcar en sangre( hipoglucemia ).

En cuestión de minutos puede sentir que está
• Tembloroso.
• Sudoroso.
• Con latidos acelerados del corazón.
• Débil, confuso.
• Hambriento.
• Malhumorado e irritado.
• Puede sufrir desmayos o estar inconsciente.

Las causas
• Demasiada insulina o medicamentos.
• No haber comido suficiente.
• Demasiado ejercicio o actividad física no planificada.

¿Qué debemos hacer?
• Primero, ingiera una fuente de azúcar que el cuerpo pueda usar rápidamente, como: tomar un vaso de gaseosa más 3 galletitas, o 1 rebanada de pan; o tomar un vaso de jugo más 1 rebanada de pan o 3 galletitas, o comer 2 sobres de azúcar más 3 galletitas o 1 rebanada de pan; o comer 4 caramelos más 1 rebanada de pan o 3 galletitas.
• Después de 15 minutos de haber comido alguna fuente de azúcar, mida la glucosa en sangre. Si su nivel aún está bajo, llame a su médico.
• En caso de obtener una respuesta favorable, repetir nuevamente igual cantidad de azúcar, gaseosa o jugo.
• Si está inconsciente, se debe llamar a un médico inmediatamente.

¿Qué sucede cuando mi nivel de azúcar es alto ( Hiperglucemia ) ?

Síntomas que pueden ocurrir en horas o a lo largo de varios días.

Mucha sed.
• Cansancio, fatiga.
• Orinar frecuentemente.
• Dolor en el abdomen.
• Indigestión, vómitos.

Las causas
• No hay suficiente insulina o medicamentos.
• Haber comido demasiado o haber comido alimentos que no son adecuados.
• Enfermedad o infección.
• Estrés.
• Falta de ejercicio.

¿Qué debemos hacer?
• Siempre use su dosis usual de insulina.
• No deje de tomar su medicamento sin consultar a su médico.
• Verifique el nivel de azúcar en la sangre cada 4 horas.
• Verifique el nivel de cetonas en la sangre o en la orina cada 4 horas, como le ha indicado su médico.
• Beba en abundancia bebidas sin azúcar para evitar la deshidratación.
• Si no puede comer porque tiene náuseas y vómitos, consulte de forma urgente a su médico.
• Llame a su médico si el nivel de azúcar en sangre se mantiene alto o si las pruebas de cetonas dan un resultado positivo.