Los regímenes de muy bajo valor calórico total según la Asociación Dietética Americana -ADA- deben ser manejados en las siguientes situaciones:
• Bajo vigilancia médica
• En obesidad severa
• Con un IMC mayor a 32
• En ausencia de trastornos médicos
• Precedida durante 2 a 4 semanas por una dieta de 1200 Kcal/día
• Por un tiempo límite de 12 a 16 semanas
• Bajo el compromiso del paciente de continuar el tratamiento a través de un programa de vigilancia
Estos regímenes resultan útiles en forma transitoria, como alternativa válida para desestabilizar al paciente en las etapas de meseta.
Su uso prolongado no solo está contraindicado por los riesgos médico-nutricionales que conllevan, sino también porque no permiten reeducar el cambio de hábitos alimentarios
Cuanto mayor sea la restricción calórica, mayor deberá ser el valor de saciedad logrado con la alimentación brindada para posibilitar la adherencia al tratamiento.
Las dietas altamente hipocalóricas o VLCD por su sigla en inglés Very Low Calorie Diet son, por definición, las que tienen un aporte energético inferior a 800 Kcal/día aunque en la práctica las más utilizadas no suelen superar las 500 Kcal/día.
¿Cuál es el objetivo nutricional de las VLCD?
El objetivo de este tipo de dietas es aportar un mínimo de energía conservando un aporte vitamínico y mineral correcto, así como una cantidad de proteínas adecuadas para evitar pérdidas de masa magra, potencialmente peligrosa.
A la vez, la restricción de grasas es casi total y el aporte de carbohidratos mínimo. Todo ello con la finalidad de conseguir una rápida pérdida de peso a expensas, sobre todo, del tejido adiposo.
Indicaciones de las dietas VLCD
La utilización de este tipo de dietas está justificada, siempre que se necesite una pérdida de peso importante y rápida, por indicación médica.
Las indicaciones más frecuentes son:
1. Obesidad mórbida (IMC mayor o igual a 40 Kg/m2)
2. Obesidad de grado II o III (IMC de 29.9 a 39.9 Kg/m2) refractaria a la restricción calórica convencional.
3. Paciente obeso con necesidad de ser sometido a alguna cirugía.
4. Obesidad complicada con enfermedades que plantean situación de riesgo para el paciente y susceptibles de mejorar si lo hace la Obesidad.
a.Diabetes tipo 2 con hiperglucemias importantes y persistentes, a pesar de dosis máximas de hipoglucemiantes orales (pastillas para diabetes).
b. Síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS) que pone al paciente obeso en situación de riesgo vital y disminuye su calidad de vida.
5. Otras situaciones que requieren descenso urgente de peso ( situaciones mecánicas que inmovilizan al paciente : hernias de disco, artrosis etc. )
El uso de las VLCD será beneficioso para demostrar al paciente que nos es refractario a la dieta que es capaz de perder peso, o bien para evaluar la posibilidad de tratamientos más radicales como la cirugía bariátrica, y en última instancia para poder producir una mejoría psicológica.
En los pacientes es necesario que sean sometidos a una intervención quirúrgica, la obesidad aumenta el riesgo de complicaciones anestésicas y quirúrgicas, por lo que la mayoría de las veces cuando la cirugía es programada, se busca en primera instancia lograr una pérdida de peso. Es frecuente en caso de hernias, litasis biliar no complicada, várices en extremidades inferiores, cirugías ortopédicas como prótesis de cadera o rodilla, et. En todas estas situaciones una pérdida de peso importante y a corto plazo, mejoraría las perspectivas de estos enfermos, disminuyendo su riesgo operatorio y aumentando las posibilidades de buenos resultados a largo plazo.
Contraindicaciones de su uso:
Absolutas
• Estados fisiológicos (infancia, adolescencia, embarazo, lactancia y ancianidad).
• IMC menor a 25
• Personas no obesas que quieren alcanzar un peso menor al deseable. Indagar en población de riesgo, tales como mujeres jóvenes con riesgo de anorexia, o que la han padecido, bailarinas o atletas.
• Pacientes con historia previa de alteraciones psicológicas graves (trastornos del comportamiento alimentario, adicción al alcohol o a otras drogas).
• Enfermedades en las que la restricción alimentaria puedan precipitar otros problemas metabólicos u otros enfermedades ( porfirias, neoplasias, enfermedad cerebrovascular e insuficiencia hepática o renal).
Relativas
En las siguientes situaciones su uso es posible, pero bajo una estricta vigilancia médica:
• Cardiopatías isquémicas ( los obesos que han sufrido un infarto de miocardio no deben emplear este tipo de dietas, durante las primeras semanas de ocurrido el episodio).
• Insuficiencia cardiaca estable
• Enfermedades de vesícula
• Enfermedad renal
•
Efectos secundarios de las VLCD
–Sequedad de boca
–diarrea o estreñimiento
–cefaleas
–Hipotensión ortostática
–calambres, fatiga
–alteraciones visuales
–caída de cabello
–alteraciones mentruales
–hambre ¡!
Recordar :
DEBEN REALIZARCE POR CORTOS PERIODOS DE TIEMPO Y
BAJO SUPERVISION MEDICA !!!!!